viernes, 12 de febrero de 2010

Comic Relief

En medio del proceso de “borrado” del dibujo (en realidad se trata de quitar las líneas de la cuadrícula una vez finalizado el boceto y eliminar lo más posible el polvo de tiza para que luego no se mezcle con la pintura), Nehuén se me acercó con intenciones de colaborar en la tarea. La verdad es que no me queda claro si lo hizo “de onda” o es que no confía demasiado en mi talento como dibujante y prefiere supervisar él mismo, y de cerca, el proyecto.
Bueno, como sea, su presencia en la sala no hizo más que llenarme de alegría y creo que, de algún modo, puede leerse como signo de buen augurio.

3 comentarios:

  1. Los niños siempre tienen la razón: un pincel a pilas es una buenísima idea..!!!!
    m.

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  2. El que es a pilas (y de larga duración) en este caso, es el niño. ¡No para nunca! Es una máquina de generar situaciones... algunas, incluso, de alto riesgo pictórico.
    r.

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  3. ¡Pinceles a pila!!! ¡Patentálo antes de que se les ocurra a los chinos!

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